Mas allá de sus libros, de sus clases magistrales para el doctorado en periodismo en la facultad de La Plata, de sus múltiples tareas en medios fundamentalmente gráficos, tarea que amaba. Martín con sus definiciones siempre polémicas típicas de alguien muy inteligente. Martín militante juvenil de izquierda, Martín un capo que entre los legisladores radicales imponía su prestigio profesional con senadores y diputados. Este cordobés que contagiaba optimismo a pesar de sus sarcasmos que se correspondían con sus vicios profesionales.
Unas cuantas horas en muchos años de buen café y muy buenas charlas. Un compartir de experiencias de vidas intensamente vividas...como pocos, alguien que generaba placer al compartir un momento. El amor por la vida, el amor por el amor...Le gustaba viajar y lo hacía, India, Sudáfrica o simplemente La Patagonia para pescar (actividad que lo apasionaba)...Se fue y nos duele...simplemente Martín seguí viajando...
Carlos Mariscal
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